La localidd de Albalatillo se ve muy afectada por la falta de lluvias, ha dado al traste con los cultivos de secano y amenaza seriamente a los de regadío ya que los embalses presentan unas reservas extremadamente bajas. Los cultivos de regadio se deberán ajustar a los recortes cambiando la siembra a productos que necesiten muy poca agua.
Las estimaciones de pérdidas pueden rondar el 80 por ciento de la producción y se intenta declarar la provincia como zona catastrófica.