En total, el proceso ha afectado a 360 hectáreas de la Huerta Vieja de Albalatillo y ha beneficiado a 76 propietarios. En concreto, se partía de 527 parcelas, que se han transformado en 120. Además, tras la concentración, se ha llevado a cabo el proceso de modernización de los regadíos. La modernización del regadío es el motor de desarrollo del medio rural y por ello, la finalización de este proceso es garantía de futuro para Albalatillo.
Al acto de entrega han acudido además el consejero aragonés de Agricultura, Modesto Lobón; el director general de Desarrollo Rural, Luis Marruedo; y el director provincial de Agricultura, Fernando Fidalgo. En su fase previa, la inversión del proceso de concentración supuso alrededor de 142.000 euros y ahora, se está ejecutando una segunda partida de 521.000 para la mejora de la red de caminos y desagües, según ha explicado Marruedo.
Los agricultores de Albalatillo reunidos han mostrado también su satisfacción. «A través de este proceso de modernización, hemos pasado de tener unas fincas prácticamente incultivables a unas explotaciones dotadas de riego y rentables. Desde luego, es lo que necesitaba este municipio para que la agricultura siga funcionando y podamos tener un futuro», ha señalado Carlos Soplón, vecino del municipio.